Con la unidad como pilar fundamental y el cambio generacional en el horizonte, la Confederación General del Trabajo (CGT) enfrenta el desafío de conformar una nueva conducción alineada con la agenda del sector y los retos del mundo laboral. En este contexto, las mesas de negociación de los distintos sectores transitan un proceso de evaluación y análisis, reflexionando sobre lo realizado, la gestión llevada a cabo y los cambios necesarios para garantizar mandatos activos y secretarías eficientes.
La unidad se consolida como el principio inquebrantable de la CGT, aunque no está exenta de tensiones y fricciones. A un mes del Congreso de renovación de autoridades, programado para el 5 de noviembre, el foco está puesto en el desempeño de las secretarías, con el objetivo de diseñar un esquema de trabajo que responda a las demandas de los trabajadores.
Las negociaciones sectoriales se intensifican, centradas en la conformación de un nuevo Consejo Directivo Nacional que incorpore un recambio generacional sin alterar el formato del triunvirato de conducción. Este esquema, consolidado a mitad de mandato tras el cambio político con la llegada de Javier Milei al gobierno, se mantendrá como garantía de cohesión, aunque no sin ciertos desencantos por su funcionamiento.
Las conversaciones giran en torno a la evaluación de las 34 secretarías, junto con las tres generales y la adjunta. Si bien algunas posiciones se consideran intocables, otras enfrentan críticas que podrían derivar en reasignaciones. El análisis del desempeño de los últimos cuatro años sirve como base para las propuestas, aunque el equilibrio general prevalece sobre evaluaciones particulares, siendo una variable más en la negociación. Paralelamente, se estudia cómo adaptar el funcionamiento de las secretarías a la nueva agenda sindical, caracterizada por la unidad como valor distintivo y la necesidad de liderazgos sólidos en un contexto de profundas transformaciones.
CGT: Oportunidades perdidas y espacios activos
La primera Secretaría a analizar es la Gremial, actualmente en manos de SMATA —ya sin Mario «Paco» Manrique quien renunció—, que representa uno de los casos más emblemáticos de inactividad. En un escenario político volátil, esta cartera se mostró «técnicamente muerta», sin generar iniciativas ni capitalizar la presencia legislativa de Manrique como diputado nacional, lo que habría potenciado la voz cegetista en el Congreso.

Hoy, varios espacios reclaman la Secretaría Gremial: el sector de Luis Barrionuevo tendría interés en la secretaria proponiendo a Daniel Vila; la CATT ampliada, liderada por Juan Carlos Schmid, la integra en su agenda; y el sector industrial —pendiente de la resolución en Alimentación— la ve como un eje de interlocución, en caso de no lograr presencia espacio en el triunvirato.
Otro foco de tensión es la Secretaría del Interior, a cargo de la UOM con Abel Furlán. Diferencias evidentes este fin de semana, agravadas por el escándalo en la CGT Rosario, han expuesto desacuerdos con la mesa de conducción respecto a decisiones y metodologías. Sectores cercanos proponen reasignarla, con Sanidad —liderada por Héctor Daer— como posible destino. Históricamente vinculada a Prensa y Comunicación, Sanidad descartaría ese rol para evitar una exposición pública que eclipse a la nueva conducción, optando por Interior como alternativa de bajo perfil pero estratégica.

En contraste, la Secretaría de Relaciones Institucionales permanecería en manos de Comercio, pese a un funcionamiento por debajo de lo esperado. El peso y gravitación de este gremio en la CGT la blindan de disputas. Similarmente, la Secretaría de Prensa podría quedar vacante si Jorge Sola (Seguros) accede al triunvirato. Su gestión, independientemente de alineamientos y formas, fue reconocida por su dinamismo: impulsó la primera página web de la CGT, redes sociales activas, cientos de comunicados y un canal de streaming en YouTube, estableciendo parámetros para futuros titulares.
La Secretaría de Seguridad Social, bajo el mando de Oscar Rojas de Maestranza, también acumula críticas por su paralización, pese a la presencia constante del dirigente en actividades cegetistas. En un contexto de inminente reforma previsional, se anticipa un cambio para elevar su operatividad. Por el contrario, la Secretaría de Cultura —con Miguel Paniagua y María Belén Ratto de SUTEP— y la de Ciencia y Técnica —a cargo de SATSAID con Horacio Arreceygor y Susana Benítez— destacan por su vigor: mesas de diálogo, convocatorias y trabajo sostenido las posicionan como intocables.

Género, derechos y áreas estratégicas: Equilibrios con impronta femenina
La Secretaría de Género, actualmente con el Sindicato de Modelos y Noé Ruiz —quien estaría de salida—, abre la puerta a una renovación con perspectiva de género. Con cuatro mujeres secretarias generales en la central, se trabaja para que mantengan roles relevantes en el nuevo Consejo. Candidatas en danza incluyen a Carla Gaudensi de FATPREN-SIPREBA, por su sólido trabajo en prensa, o Marina Jaureguiberry de SADOP, alineada con el pedido de Daer por un perfil de peso.
En Vivienda, la Unión Ferroviaria de Sergio Sasia no registró avances; sus gestiones en planes habitacionales se realizaron más por fuera de la CGT, junto a gremios como Seguros y UOCRA. Esto la marca como candidata a reasignación para evitar repeticiones de inactividad. En Turismo, en cambio, SUGARA con Roberto Solari y Luna Villar impulsó una gestión destacada: mesas con el banco turístico del sector, relevamientos, encuentros y una red sindical que valorizó el turismo como bastión cultural para trabajadores y familias, pese a un marco adverso.

Acción Social, en Obras Sanitarias con José Luis Lingeri, se mantiene activa con reuniones de gestión recurrentes, aunque los resultados, sobre todo en materia de obras sociales y la relación con el Gobierno, no cumplieron expectativas. Finanzas, asignada a Panaderos pero sin titular visible en la web oficial de CGT —Gastón Frutos—, opera intervenida desde hace tiempo, como ya informó Mundo Gremial. Su continuidad parece improbable, y hasta peligra una vocalía para Frutos, protagonista de fuertes escándalos en los últimos años.
Igualdad de Oportunidades, con Graciela Aleñá de Viales, careció de impacto, limitada a eventos aislados como un «encuentro de té» con Vanesa Siley y Noé Ruiz, eclipsado por el masivo encuentro de mujeres sindicalistas en UPCN.

Los puntos positivos y los intocables
Destacan positivamente Derechos Humanos, liderada por UEJN con Julio Piumato y Maia Volcovinsky: múltiples actividades, como el reciente lanzamiento de una muestra en la ex ESMA, con alta convocatoria que impulsó a Volcovinsky como candidata firme al triunvirato. Asuntos Legislativos, con Norberto Di Próspero de APL, experimenta un reacomodamiento exitoso, con chances de continuidad y teniendo en cuenta la centralidad legislativa que tiene la agenda laboral con el gobierno de Javier Milei. Empleo, a cargo de Juan Carlos Schmid, fue inactiva pese al perfil político del ex secretario general; su renovación se articularía con reclamos de CATT por Gremial y la Secretaría General.

Capacitación, en UTHGRA con Argentino «Tito» Geneiro, y Relaciones Internacionales, con Gerardo Martínez de UOCRA, transcienden la media cegetista: convocatorias históricas y construcción a largo plazo las aseguran. Juventud, actual con Sebastián Maturano de La Fraternidad —reconocido por su formación y movilizaciones—, podría pasar a Camioneros con Jerónimo Moyano, por pedido de Hugo Moyano; Fraternidad buscaría otra secretaría como premio a su crecimiento. Protección de la Niñez, en UDOCBA, no registró trabajo y no repetiría, al ser un gremio provincial hoy desvinculado del moyanismo, sector que lo incluyó en la nómina actual.

Definiciones en secretarías estratégicas, de cara al futuro
Salud Laboral está actualmente encabezada por Cristian Jerónimo de SEIVARA, quien se convirtió en un firme candidato a co-secretario general. Se trata de una secretaría nueva en CGT, creada en 2021 a partir del cambio de estatuto, de agenda activa con organismos y sindicatos. De ser confirmado Jerónimo en el triunvirato, se habla de varios candidatos interesados para la misma desde sectores aliados.

Medio Ambiente, Cambio Climático y Transición Justa, está en manos de UTA con Roberto Fernández. Su gestión fue nula pese a su carácter estratégico; el moyanismo levantó la mano y la reclamaría para un aliado como AGOEC (sindicato del CEAMSE).
En Industria, Rodolfo Daer —que recientemente se bajó de la conducción de su sindicato— no sostendría su rol; CASIA (Confederación de Asociaciones Sindicales de Industrias de la Alimentación) propondría a Héctor Morcillo u otro del sector industrial vía CSIRA (Confederación de Sindicatos Industriales de la República Argentina).

Asuntos Municipales, hoy con Amadeo Genta de SUTECBA, acumula inactividad y debate sobre representación: Genta versus el sector de la Confederación de Trabajadores Municipales (CTM) con Hernán Doval, en un área desperdiciada ante la creciente agenda territorial. Así lo creen distintos sectores en el seno de CGT, aunque Genta mantiene una fuerte alianza con las viejas conducciones que lo podrían llegar a sostener.
Innovación y Futuro del Trabajo, en UTEDYC con Carlos Bonjour y Vanesa Núñez —una de las mujeres con mayor ascenso—, aspira a permanencia por su enfoque en temas centrales del mundo laboral.
En síntesis, estas negociaciones reflejan una CGT en transición: la unidad como guía, pero con un coletazo inevitable del cambio generacional que reconfigurará el Secretariado. El triunvirato, con sus sombras y luces, absorberá parte de esas tensiones, mientras el equilibrio entre espacios define un armado que aspire a mayor efectividad en tiempos de agenda renovada.